Una persona ha resultado herida por un disparo de arma de fuego en la cara, la madrugada de este lunes, durante un tiroteo en las Tres mil viviendas. Según informa la Policía Nacional, el suceso ocurrió durante las 03:40 horas en la calle Viento del Pueblo.
Por el momento se desconocen las causas que han podido provocar este altercado. El herido ha sido trasladado rápidamente al hospital Virgen del Rocío, donde permanece en estado crítico.
Segundo tiroteo en menos de una semana
No es el primer tiroteo que se produce en Sevilla durante estos días. El pasado viernes se produjo otro tiroteo en el asentamiento chabolista de El Vacie en el que resultó herida de manera leve una mujer por un disparo. El altercado se produjo entre dos familias y según informó la Policía, los disparos no cesaron durante al menos 20 minutos, las fuerzas de seguridad desplegaron un amplio dispositivo y el tráfico estuvo cortado durante la mañana.
Las Tres Mil, el barrio que lidera los ránkings de barrios más peligrosos de España
Ya sea realidad o mito, por simple repetición, Las Tres Mil Viviendas de Sevilla lidera cada año los rankings en Internet del barrio más peligroso de España. Poca gente sabe que está compuesto por seis barriadas pertenecientes al Polígono Sur. Y de estas barriadas, las verdaderamente conflictivas son la de Murillo y Martínez Montañés, conocida también como “Las Vegas”. Pese a que las administraciones locales invierten cada año en el distrito importantes partidas presupuestarias, los resultados no terminan de llegar, perpetuándose situaciones de extrema desigualdad, marginalidad y economía no regulada.
Precisamente, esta es la economía del tráfico de droga, que prolifera en las calles del barrio. Se usan los pisos como plantaciones de marihuana. Estas plantaciones son un verdadero peligro, al estar enganchadas precariamente a la red eléctrica para dotar de luz y calor a las plantas —una planta de relativamente reducido coste y alta rentabilidad— que ponen en peligro la vida del resto de vecinos. Son éstas normalmente viviendas sin titular legal conocido, ya que abandonaron hace años el inmueble, siendo ocupados ilegalmente por estos traficantes.
Acceder a los puntos más conflictivos de las Tres Mil Viviendas es una operación de alto riesgo. Las miradas con recelo se suceden. Cuando ven un coche o una cara nueva te van siguiendo a pie, en moto, con otros vehículos… siempre sospechan que puedas ser un policía o algún periodista. Y es que a estos clanes no les interesa que la realidad se conozca en los medios de comunicación.
