La diputada de Podemos viajó el lunes a la isla de Malta para encontrarse con los miembros de la denominada Flotilla de la Libertad, atacada, según denuncia la organización, por el ejército israelí, para ver en qué condiciones se encuentran los miembros de la misma.
Según cuenta la diputada por Granada, el ataque recibido por la flotilla no ha ocasionado víctimas mortales, pero sí graves daños a la embarcación. Según traslada Velarde, lo primero es exigir una condena firme del Gobierno de Malta, al igual que a la Unión Europea y al Gobierno de España y del presidente Pedro Sánchez —quien aún no se ha pronunciado— teniendo en cuenta que existe una delegación de españoles en la misión que podrían haber sido víctimas del ataque. La diputada denuncia que el presidente Sánchez aún no ha emitido ningún pronunciamiento sobre este ataque, en la misma línea de silencio que el gobierno maltés y la Unión Europea. «A estas alturas, es gravísimo» recalca Velarde.
Por otra parte, Podemos, a través de la diputada granadina, pide una inspección por parte de expertos y técnicos independientes que puedan dilucidar qué ha pasado, cómo ha pasado y de quién es la autoría del ataque. Sin embargo, para Podemos, no cabe ninguna dudas de quien está detrás: «esto no puede depender de un gobierno o de otro, sino que esto debe hacerse de forma independiente, acompañándose de observadores de la ONU, acompañados de cargos públicos y parlamentarios europeos, para que se llegue hasta el final y se puedan asumir las consecuencias y la responsabilidad de estos hechos ocurridos tan sumamente graves».
Velarde denuncia una estrategia por parte del gobierno de Israel para dejar morir de hambre, de sed, y desnutrición al pueblo de Palestina en su propósito de desocupar la Franja de Gaza. Por tanto, este ataque tendría como objeto «bloquear cualquier intento de acceso por tierra, por mar, o por aire a Gaza», ni siquiera para poder hacer llegar toda la ayuda humanitaria necesaria en este momento. «Es una estrategia más de limpieza étnica al pueblo palestino y desde luego no lo podemos permitir» enfatiza Velarde.
Según ha podido saber TuPeriódico, en conversación telefónica con activistas presentes en el ataque, cuando el barco se incendió producto del ataque de los drones, se encontraba a pocos metros un barco antiincendios, bien equipado, pero sin pabellón. Este barco, no identificado, comenzó a dar vueltas alrededor de la embarcación de la flotilla atacada sin prestar ayuda, durante algo más de una hora.
Durante ese tiempo, la tripulación del barco antiincendios conminó a los miembros de la flotilla a que abandonasen la embarcación y se desplazasen de cubierta hasta la nave sin pabellón, sin activar el protocolo para detener el fuego del barco.
Los miembros de la flotilla hicieron caso omiso a esta petición, por miedo a que el barco incendiado pudiese ser remolcado a aguas libias y, por tanto, perderlo.