La segunda edición del Fortín gastronómico se celebrará el próximo 23 de agosto en el Castillo de Santa Catalina de Jaén, donde los participantes podrán asistir a una demostración de diferentes platos y degustarlos.
Enmarcada en el programa Jaén no duerme en verano, esta actividad organizada por el área de Turismo de la concejalía de Cultura regresa «tras el éxito de la primera edición», según ha informado este miércoles en una nota el Ayuntamiento.
Más allá de poder contemplar in situ la preparación de los platos y de su degustación, «los asistentes tendrán la oportunidad única de conocer los secretos de elaboración de cada bocado y la profunda conexión histórica de cada tapa con momentos clave de la propia fortaleza».
«Una experiencia sensorial y educativa que se maridará con la gastronomía y la rica historia del emblemático castillo, todo ello acompañado de bebidas refrescantes. Una visita inolvidable, que se suma a la conmemoración del 1 200 aniversario de la capitalidad de Jaén y que ofrece al público una rica y original experiencia sensorial», ha señalado el Ayuntamiento.
En concreto, el Fortín gastronómico permitirá conocer y degustar platos de diferentes épocas: andalusí, cristiana y de la ocupación francesa. Cada una de ella está influenciada por diferentes platos e ingredientes que reflejan lo característico de cada cocina.
Por ejemplo, la cocina andalusí se manifiesta en platos como las albóndigas de Abd al-Rahman II, el pastel de berenjena andalusí con miel de caña o el alfajor de frutos. La influencia cristiana se deja ver en platos como migas con huevo y frutos secos, el hummus o las espinacas con pipones y pasas.
De su lado y aunque menos prominente, la cocina francesa dejó también su huella en algunos platos como la sopa de tomate con uvas, la pipirrana con arenques o el bacalao en escabeche.
Por otra parte, desde el Ayuntamiento se ha valorado la buena acogida del programa Jaén no duerme en verano, con un amplio abanico de actividades nocturnas en la capital. Rutas de senderismo, vías ferratas, escape room, conciertos, gastronomía y un campamento histórico son algunas de ellas.
Por ello, desde el área de Turismo «ya se está trabajando en futuras iniciativas y propuestas para que la ciudad siga disfrutando de actividades similares durante todo el año».