Como cada año por estas fechas, la gente se dedica a cantar villancicos, mientras nuestro alcalde se dedica a repetir el mismo estribillo enfático, solemne y majestuoso año tras año, aunque modifica alguna que otra palabra para hacerlo ver distinto, pero en el fondo lanza un idéntico mensaje.
Intentaré explicarlo: esta misma mañana (día 23 de dic.) despertaba con el siguiente titular de su NODO particular, al que le llama TOMA NOTA. «UNOS SERVICIOS PÚBLICOS FUERTES, LA BASE DE LOS PRESUPUESTOS MÁS ALTOS DE LA HISTORIA». Invito a los lectores que lean lo que se publicaba en el ejercicio 2024. Dijeron textualmente. «Techo histórico que está llamado a reforzar los servicios públicos como derecho de la ciudadanía». Lo dicho: mismo sentido, mismo estribillo, mismo mensaje: Siempre es el más. A él le gusta magnificarlo. Aunque hubiese subido solo 3 euros más, ya hubiese superado «el techo histórico» del ejercicio anterior.
Este alcalde parece más un agente comercial que un buen político. Lo que debería ser es más didáctico y explicar a la ciudadanía que un presupuesto es algo que se presupone y que su resultado final se verá al año siguiente, cuando se firme su autoliquidación. Hasta ese momento concreto es cuando se conocerá el resultado justo y exacto de su aumento. Pero llegados a ese momento ya se habrá olvidado todo lo dicho «Donde dije diego, digo lo que quiero porque la gente me sigue creyendo» dirá para sus adentros.
El mismísimo Aristóteles nos dijo que el ignorante afirma, mientras que el sabio duda y reflexiona. Este grupo municipal del PSOE, que ostentan el gobierno local, nos hacen ver sistemáticamente en su NODO particular que en la Rinconada todo es idílico, que no hay problemas. Han superado con creces el mito de Jauja, ya que según ellos vivimos en el Paraíso, y que Yahvé se confundió al situar el edén terrenal entre el Tigris y el Éufrates, cuando lo que tuvo que haber hecho era situarlo entre el Almonazar y el Charco (los rinconeros de pura cepa entenderán perfectamente lo del Charco) Y ¿por qué digo que el Sr. Alcalde es poco original?, (me acojo a la frase anterior de Aristóteles) pues porque usa un lenguaje dicotómico. No puede ser público y privado a la vez. O es servicio público o es servicio privado, aunque realice un fin público. Es una dicotomía.
La evidencia es bien sencilla; cualquier ciudadano que se dirija al Ayuntamiento a hacer tal o cual gestión con quien se topará en la entrada no será con un funcionario que haya obtenido su plaza por concurso público, ¡no!, sino que se topará con un guarda jurado privado y de uniforme. (Ojalá esa persona fuera funcionario público y así su puesto laboral estaría al cien por cien asegurado y no al albedrío empresarial) ¿Entonces, de qué servicios públicos habla este señor alcalde? A ver: El personal que trabaja en Parques y Jardines, ¿pertenecen al convenio y a la nómina municipal o pertenece a la de una empresa privada? La respuesta correcta es: privada. O sea, servicio privatizado con finalidad pública. Lo mismo ocurre con el personal de monitores deportivos, o trabajadoras de cuidados o transporte público o monitores de ocio y/o aula matinal y comedores escolares, o personal de residencia de mayores o recogida de basuras… y si no han privatizado a la policía local es porque no pueden, sino también pasarían a formar parte de esos servicios públicos fuertes… fuertemente privatizados (se les olvidan poner su auténtico apellido).
Y es tan de farol este alcalde que incluso llega a decir que La Rinconada es el espejo de la mejor Europa. O sea que nos toma por párvulos porque, al parecer, los ciudadanos nórdicos, por citar una zona europea, sienten envidias de lo bien que se vive en La Rinconada y que se están planteando emigrar al sur del sur de Europa, ¡Hay que ser presuntuoso! ¡O narcisista, o padecer el efecto de Pigmalión, o todo a la vez! Y, al decir esto, me refiero y hago la observación de que me parece indigno y abusivo observar el número de fotos en que sale en cada página de su TOMA NOTA, una vez llegué a contar 19 veces. El culto a su imagen personal se pone de manifiesto en cualquier TOMA NOTA: entrevistas pactadas y ensayadas; reportajes repetidos, lenguaje hiperbólico, etc. Ese es su modus operandi de construir su popularidad.
Sepan ustedes, queridos lectores, que esa ostentación a la propaganda propia y personal se la pagamos nosotros a través de nuestros impuestos; ese culto a su imagen asciende a más de 250.000 euros. ¡Sí, han leído bien! Muchos estaréis pensando, al igual que yo, que hay otras prioridades en gastos más importantes que la difusión de su propia imagen.
Si hay que decirlo, se dice. Este señor, y no me refiero a su condición personal, sino al cargo que ostenta y que lo ejerce de una manera prepotente y absolutista (desde hace ya la friolera de 30 años viviendo del erario público). ¿Alguien puede encontrar una página de su NODO o de su Radio Rinconada donde exprese una versión crítica y/o distinta? ¿Existen comisiones plurales y con participación de la corporación democrática, de control y seguimiento de bolsas de empleo, de adjudicaciones de sedes, etc.? Este señor y sus antecesores con sus mayorías superabsolutas, han creado, siguiendo la consigna de Alfonso Guerra, una tupida red clientelar de nepotismo, de enchufismo, de favoritismo, de filtraciones en el asociacionismo, tan así es que han creado un pseudo régimen, donde el sentir democrático brilla por su ausencia. Y siempre se informa desde la óptica mayoritaria. La oposición está vetada.
Un ejemplo concreto: página 2 del ejemplar TOMA NOTA n.º 444 de diciembre 2024 dice: «unos presupuestos que han sido aprobados por unanimidad de los grupos PSOE, PP y Vox, con la ausencia de los ediles de Con IU-Podemos», por casualidad se les ha olvidado que ambos concejales estaban enfermos y por ese motivo no pudieron estar presentes en el Pleno, pero también se les olvida decir que elevaron bastantes enmiendas, en tiempo y forma al expediente de los Presupuestos. ¿Casualidad? Yo opino que falta de rigor democrático. Por ello son muchos los que colaboran en «el mensaje de lo fantástico, del milagro rinconero». Eso se hace palpable en cada contienda electoral: la amplia y renovada mayoría de interventores y apoderados del PSOE o son empleados públicos o están a punto de serlos. Muchas personas se ofrecen a ir en sus listas porque después serán ampliamente recompensados. Parece que es más cuestión de estómago que ideológica O por aquello de la pérdida de la subvención.
Si hay que decirlo, se dice, en conversaciones cotidianas en las que se refieren a la gestión municipal, se suele oír aquello de que es el mejor alcalde del mundo mundial, sin embargo, otros comentan por la boquita chiquita todo lo contrario.
A los primeros yo les planteo lo siguiente: si es tan buen alcalde como dicen y consigue tantas cosas como se dice, pues pónganlo de alcalde en Guadalcanal, o Peñaflor ¡a ver cuántas cosas consigue allí! Con ello lo que les quiero hacer ver es que la geopolítica influye en la toma de decisiones. Como también influye el número de trienios en la función pública, que son más de 3 décadas. Y si desde la Diputación Provincial tienen que promocionar tal o cual municipio, se hace en función de la dimensión del ayuntamiento.
Otra cosa frecuente que también suele ocurrir es comparar nuestro pueblo con otros pueblos cercanos pero de dimensiones menores, y por consiguiente, con competencias menores, por ejemplo lo comparan con Brenes o Alcalá del Río o Villaverde o cualquiera de nuestra comarca, y en todos estos casos La Rinconada siempre saldrá victorioso, por la sencilla razón objetiva que un centímetro es más pequeño que diez metros. A esas mismas personas nunca las he oído comparar La Rinconada con Mairena del Aljarafe, o con Utrera o con Alcalá de Guadaira o con Lebrija o Tomares o con la mismísima Dos Hermanas.
A los segundos: que sigan por el buen camino, hincar la rodilla no es propio de leales luchadores, pues siempre habrá meta, más cercana o más lejana, pero habrá meta. Árboles más grandes han caído.
Al principio me referí a una segunda parte, pues habrá que estar atentas y atentos para descubrirla. Os espero.
